lunes, 29 de octubre de 2012

Martín

Hoy, a primeras horas de la mañana, nació mi sobrino Martín, se tomó su tiempo, pero llegó. Martín hace el sobrino noveno, pero la emoción ha sido la misma y con la misma intensidad que el primero, cuando decides no ser madre, los sobrinos se convierten en tu lugar en el mundo. Y este año la suerte ha sido serlo  por partida doble.
Martín no es el único niño que ha venido al mundo en el día de hoy, hay miles más y lo más probable es que no todos en las mismas circunstancias. Martín ha tenido la suerte de nacer en lo que conocemos como el primer mundo, con una gran sanidad hasta ahora pública y arropado por el amor y los sueños de sus padres, abuelos, tíos, primos y demás personas que rodean su vida.
En el silencio que suena estruendosamente en los hospitales durante la madrugada oyes todo,  las risas, los llantos, las voces, los pasos, los suspiros, las ausencias y hasta los planes que haces en tu cabeza cuando lleves a Martín al parque, a su primera película, a su primer día de cole, cuándo se celebre su primer cumpleaños, su primer diente, sus primeras risas.
Martín es un hijo deseado, un nieto deseado, un sobrino deseado, un primo deseado y por eso mismo esperado con muchas ganas.  Martín es un niño que merece crecer  en un mundo mejor,  por eso Martín es una razón más para no rendirse, para seguir peleando, para ser más y mejores. Porqué yo quiero que Martín sepa que el amor es el motor de la vida.
Martín  tiene preocupada a su madre porque no quiere comer de su teta, pero Martín aún no es consciente del hambre, de la desesperación, de la tristeza de no tener que comer, Martín es un bebe feliz, que se dedica con su venida al mundo a lo más difícil, hacer felices a quienes le rodean, no cualquiera hoy en día. Martín empieza y nos ayuda con su nacimiento a prepararse para ser un hombre libre y que los demás lo seamos también.
Hasta hoy Daniel, Darío, Mario, Manuel, Lucas, Victoria, Pepe y Pablo eran mi lugar en el mundo, hoy se amplía un poco más con la llegada de Martín. No sé qué es eso de ser mamá, pero puedo asegurar que ser tía, es la pera limonera.

2 comentarios:

  1. Muchas veces sobran las palabras y otras es una bendición escucharlas. No me queda más q suscribir todo lo bueno q deseas para Martín y su gran familia.
    Un abrazo para todos los Medero Vázquez que une Martín.
    Su tita Inés.

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  2. Muchas felicidades para toda la gran familia que sois. Dale un fuerte beso a Marta, por lo visto la vi el último día de estar gordita y su cara ya decía todo los que tú has escrito. Un beso muy gordo para su tía también. Antonia Luisa

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