viernes, 12 de agosto de 2011

A propósito del Papa

Como declaración de principios he de decir que no me opongo a la visita del Papa.  Dicho personaje es jefe de un estado y puede venir invitado como tal por el jefe de estado de este país. Lo que no es el caso, como el Papa es multipolar, en ese caso no es una visita de estado, en este caso actúa como jefe de una gran secta y acude invitado por los adeptos a la secta que en este país habitan. Y mientras las sectas sean legales, pues hay que dejarlas transitar. Al fin y al cabo el objetivo  de estas jornadas es hacer caja y poco más.
Dicho esto, he de decir que lo que me molesta es que el dinero público (es decir de todos los ciudadanos de un estado aconfesional como este) se utilice para jalear la fiesta que durante 5 días se prepara, no me opongo a que se dote de las infraestructuras básicas, al igual que se hacen en los conciertos, festivales musicales o cualquier otra clase de grandes concentraciones.  Tampoco me opongo a que toda la gente que quiera participar en este evento lo haga, faltaría más, para mi existen cientos de maneras de pasar unas vacaciones, pero cada quien es libre de hacer de su capa un sayo. Faltaría más.
Lo que me molesta es que la televisión pública vaya a dedicar la mayoría de su tiempos en alguno de sus canales a transmitir los mensajes homófobos, machistas, intolerantes y pasados de moda que el santo padre y sus secuaces tienen la costumbre de practicar, lo que me molesta es que el presidente del gobierno que yo he elegido  vaya a rendir pleitesía a este señor que viene en visita privada, lo que molesta es el uso de espacios públicos para una religión cuando en iguales circunstancias ninguna otra se ve tan favorecida, siendo como somos un país multicultural religiosamente hablando también, lo que me molesta  es que los ayuntamientos gasten un dinero que no tienen en colaborar con este tipo de eventos discriminando a otros. Lo que me molesta es que en tiempo de crisis, se despilfarre el dinero público para satisfacer a un grupo que solo se representa a si mismo.
En realidad la visita del papa no me parece ni mal ni bien, me da un poco igual teniendo en cuenta que esta visita no es el principal problema ni de este país, ni de este mundo en este  momento y al igual que sucede con todos los acontecimientos últimamente, el ritmo vertiginoso de la realidad, hará que un par de días después esta visita ya sea historia, no creo que el papa se vaya a salir del guión, habitualmente se evade de la realidad (como buen político actual) y solo ver lo que quiere ver (qué es la paja en el ojo ajeno). Eso sí, un poco de humildad no vendría mal.
La realidad es que en España los homosexuales y lesbianas se casan y son felices, la realidad es que la medicina puede salvar vida utilizando para ello la vida de otro familiar, la realidad es hay más gente que se casa por lo civil y no por la iglesia, la realidad es que incluso hay más gente que viven en pareja sin hacer ningún tipo de trámite, la realidad es que nos podemos divorciar y podemos abortar con plena seguridad, la realidad es que podemos elegir morir con dignidad, la realidad es que los creyentes cada vez creen menos en la iglesia oficial, que las iglesias están cada vez más vacías y la jerarquía se niega a hacer autocrítica responsabilizando de sus torpezas y abusos a todo lo que se mueve a su alrededor. La realidad es que la doble moral sigue siendo una moda bastante practicable.
La realidad es que por encima de este circo, que mediáticamente alcanza los niveles de un campeonato del mundo deportivo, de unas olimpiadas o de un desastre natural, hay una iglesia de base que trabaja, que está cerca de quien la necesita y que no necesita espectáculos pirotécnicos para agrandar su fé y su invalorable tarea.
La realidad, triste realidad, es que después de 35 años de democracia, no ha habido un gobierno en este país que haga efectiva la separación iglesia-estado, lo que significa que la demagogia y la palabrería que muchos y muchas  utilizan están de más.
 El Papa vendrá y se irá, como otros muchos gobernantes totalitarios (como es el caso) ó demócratas, que por este país pasan, menos protestar y más laicidad de verdad. Al fin y al cabo esta visita es una nueva maniobra de distracción masiva.

No hay comentarios:

Publicar un comentario